Carlos Sáenz de Tejada y Joaquín Valverde
01 May - 30 Jul 2010

Entre las manifestaciones artísticas dedicadas a la propaganda política durante la Guerra Civil Española y su prolongación durante la posguerra, ocupa un lugar destacado el conjunto realizado para ilustrar la visión canónica del conflicto elaborada por el bando nacional que representó la Historia de la Cruzada Española. Esta obra, iniciada antes de finalizar la guerra, fue editada por Ediciones Españolas S.A. entre 1939 y 1944, estando encomendada la dirección literaria a Joaquín Arrarás y la artística al pintor e ilustrador Carlos Sáenz de Tejada.

Este último reunió a su alrededor a un conjunto de artistas entre los que destaca el pintor Joaquín Valverde, compañero de estudios en el Madrid del ultraísmo de comienzos de los veinte. El resultado de su trabajo y el de sus colaboradores fue un amplio corpus de ilustraciones que mostraban la visión que tenían los vencedores de la guerra y de los vencidos.

La Historia de la Cruzada Española es una muestra de arte al servicio de la propaganda quizás la más importante de todas las emprendidas por los sublevados, que establece la iconografía del conflicto, en especial la imagen del enemigo, de los episodios bélicos y sobre todo del terror. Los dibujos de Sáenz de Tejada y de Valverde, reunidos a lo largo de un trabajo sirvieron para ilustrar como si fueran códices los 36 tomos repartidos en 8 volúmenes que escribió el equipo de Arrarás auxiliado por un amplio elenco de corresponsales. Los centenares de originales producidos entre finales de 1938 y 1943, quedaron archivados una vez acabados los trabajos de imprenta, y sólo algunos de ellos fueron expuestos durante los difíciles años de la 2ª Guerra Mundial en Venecia, en Berlín y en Madrid.

Desde entonces artistas y obras cayeron en un olvido que nadie quiso despejar. En los últimos años cuando ya los acontecimientos que impulsaron la obra se han convertido en historia, cuando ya no se discute la importancia artística de Carlos Sáenz de Tejada como pintor e ilustrador y se recupera a Joaquín Valverde, esta exposición confirma el interés de ambos pintores y de la producción artística realizada durante la Guerra Civil.