ARCOmadrid 2018 dedica su nueva edición al futuro. Si bien el arte contemporáneo no predice, puede mostrar situaciones y estructuras poco conocidas, cuya extensión configura nuestro porvenir inmediato en diálogo con el presente.
La edición número 37 de la convocante feria de arte se inaugura hoy y seguirá hasta el domingo, con 208 galerías de 29 países. Entre ellas, 48 son novedades en este espacio, como König Galerie, de Berlín. Otras, como la francesa Thaddaeus Ropac, regresan. ARCOmadrid reafirma su intención de presentarse como el referente latinoamericano en Europa. El 68 por ciento de las galerías que exponen en el sector internacional tienen sede en Latinoamérica y el año próximo el país invitado será Perú.
Ya en su 35º aniversario, los organizadores vieron que no era mala idea reemplazar un criterio geográfico por una gran sección expositiva con un concepto central y dedicar cada dos años la atención a un nuevo contexto. Por eso, esta vez no será eje el arte de un país invitado.
En esa gran sección,”Futuro” -que las curadoras Chus Martínez, Rosa Lleó y Elise Lammer designan como exposición-, participan 19 galerías, con una característica: la horizontalidad. Los stands no tienen divisiones y hablan de un porvenir construido en conjunto. Allí están las ciberselvas y los cruces entre seres vivos y robótica de Adriana Minoliti (Galerie Crèvecoeur), el arte digerible de Eduardo Navarro (Nara Roesler) o los cuestionamientos lúdico–críticos y planteos de convivencia cósmica de Julius Koller (Gb agency).
El futuro también atraviesa el tema de los distintos foros y replica en otros espacios de Madrid, con exposiciones en el CA2M, el Museo Thyssen Bornemisza o Matadero Madrid. En la sección Opening, con galerías que no superan los siete años de antigüedad como las latinoamericanas Cavalo, El Apartamento, Sindicato, Tiro al Blanco o la argentina Zmud, es posible encontrar puentes futuros. En el stand de esta última la artista Aimée Zito Lema cosifica e interviene con tóner fotográfico imágenes pertenecientes a archivos de traumas históricos hasta anular la representación visual y exponer su tensión; Faivovich & Goldberg concentran su extendida investigación de Campo del Cielo en cinco ampliaciones únicas de microfotografías de cortes de meteoritos.
Las galerías argentinas Barro, Ruth Benzacar, Del Infinito, Henrique Faria, Jorge Mara–La Ruche y MCMC completan el listado de espacios con una importante representación de artistas nacionales.
En ese sector, un video de Tomás Maglione y una serie de libros y objetos manipulados de Liliana Porter exponen el poder de las miniaturas en un entorno de trampantojos pictóricos protagonizado por Jorge Macchi y Jazmín López (RuthBenzacar). También encontramos Arte Moderno de César Pasternosto, incluida una serie reciente que presentó en el Museo Thyssen-Bornemisza (MCMC).
Es posible reconocer vínculos intergeneracionales como los que se dan en el stand de Henrique Faria entre el despilfarro humorístico de Oscar Bony y sus pinturas a la moda y el sarcasmo estilístico de la pieza de Mauro Guzmán o las investigaciones de política óptica de Zinny & Maidagan y Nicolás García Uriburu. Por primera vez en una feria internacional, podemos ver un Solo Project de Federico Manuel Peralta Ramos (Del Infinito), un conjunto de dulces provocaciones repartido entre pinturas textuales, dibujos y retratos que incluye una copia del vinilo editado en 1970 con las canciones: “Soy un pedazo de atmósfera” y “Tengo un algo adentro que se llama coso”.
Estas galerías no son los únicos proyectos interesados en participar de la invención y el mercado a través de artistas argentinos. Hay obras de Pablo Accinelli (The Goma, Madrid), Victor Grippo (Alexander and Bonin Nueva York), Armando Durante en José de la Mano (Madrid), Amalia Pica en Instituto de Visión (Bogotá), Roberto Jacoby, Adriana Bustos y Luciana Lamothe en Bacelos (Madrid). En una edición donde la totalidad de secciones curadas son dirigidas por mujeres, es posible a su vez interesarse en las mejores piezas escultóricas y espaciales firmadas por June Crespo, Esther Ferrer, Fernanda Gomes y Marta Boto.