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El mercado se recupera con el éxito de ARCOMADRID

La 36ª celebración de la Feria Internacional de Arte Contemporáneo ha concluido con un balance positivo en el que las adquisiciones han sido numerosas. Tras haber acogido más de 100.000 visitantes de todas partes del mundo, ARCOmadrid ha incrementado su reconocimiento y prestigio en el panorama internacional. Además, esta edición se ha erigido como punto de encuentro e intercambio entre Europa y Latinoamérica. Parece ser que el mercado del arte se ha refortalecido, ¿Lo diferente al año pasado? Su filosofía más estética, comedida y para todos los públicos.

En general, las galerías han mostrado su entusiasmo tras una semana de muchas ventas y muy buena calidad de los coleccionistas que se han paseado por sus stands. Así lo declaran los de P420 ya que “está muy bien organizado y funciona de maravilla. Es un aspecto que hemos comentado con otras galerías y estamos todos de acuerdo”. Jocelyn Wolff, en su tercera participación en la feria, se suma a esta percepción y afirma: “estamos satisfechos porque los coleccionistas han mostrado mucho interés y hemos podido establecer muy buenos contactos. Es para valorar el esfuerzo de ARCO por traer a coleccionistas tan receptivos”. Del mismo modo, Lelong, que ha cumplido sus expectativas, añade: “estamos especialmente contentos con el programa internacional de coleccionistas”. José de la Fuente afirmó “hemos percibido mucho interés desde el arranque y destacamos la calidad de coleccionistas tanto internacionales como españoles”.

Esta edición ha optado por presentar obras más comerciales y de artistas reconocidos. Se ha definido con lo conservador y el recato, incluso en lo que respecta a la política se han mantenido (generalmente) al margen, algo verdaderamente sorprendente en los tiempos que corren con el polémico Donald Trump al mando de la gran potencia occidental e importante foco artístico contemporáneo. Quizás sea  saludable el método “una de cal y otra de arena”. Sin embargo, la 36ª ha demostrado que, esta vez en la que lo provocador y controvertido ha quedado apartado, el éxito de la feria es muy factible.

Entre las compras institucionales y corporativas confirmadas en esta edición figuran las adquiridas por la Fundación ARCO por valor de 146.000 euros, financiadas con fondos procedentes de donaciones  particulares y de la recaudación de la cena celebrada con motivo de los Premios Fundación ARCO 2017. Las obras obtenidas, corresponden a 7 artistas de 7 galerías participantes: Falke Pisano -Ellen de Bruijne Projects-; tres piezas de Ivan Grilo -Casa Triangulo-; Daniel Steegmann Mangrané -Esther Schipper-; dos piezas de Sergio Prego -Ethall-; dos de Von Calhau! -Pedro Alfacinha-; Gwenneth Boelens -Klemm’s-, e Irma Blank -P420-, que pasarán a formar parte de  la Colección Fundación ARCO, alojada en CA2M Centro de Arte Dos de Mayo de la Comunidad de Madrid.

Asimismo, el Museo Reina Sofía ha obtenido un gran número de adquisiciones, como de costumbre. Esta vez han sido un total de 18 obras de 12 artistas nacionales y extranjeros por un valor total de 389.200€. Entre otras destacan Eloy Laguardia y Mathias Goeritz de la Escuela de Altamira; Obras pertenecientes al movimiento Centro de cálculo como la de Tomás García Asenjo, pintura que llevaban tiempo deseando incluirla en sus fondos; una singular pieza del conocido Mladen Stilinovic que será ya la segunda que atesore el museo y consiste en una tela estilo pancarta que reza “An artist who cannot speak english is NO artist”. Para completar la colección de arte conceptual catalán, han comprado un Ferran García Sevilla hecho en la década de los 70, el periodo que les faltaba de este autor. En representación femenina han adquirido varias obras de grandes dimensiones de  la alemana Anna Opermann; La Mer Bleu “anti-pictótico”de la francesa  Anne Marie Shneider ; y finalmente Burning Books I de la joven artista argentina Adriana Bustos que habla de la censura.

A esta motivación de compra se les han añadido otras instituciones  y grandes colecciones privadas como: Eduardo Costantini, La colección Sánchez-Ubiría, DKV Seguros, La Fundación Helga de Alvear, Colección Banco Sabadell, Fundación EDP, Mariana y Eduardo Hochschild, Fundación María Cristina Masaveu Peterson, Des Moines Art Centre,  Artium y MoMa.

Una de las galerías que salió especialmente victoriosa de esta edición ha sido José de la Mano, que ha empezado con muy buen pie estrenándose en este evento con la venta de numerosas obras; sin ir más lejos, 11 de las 18 que ha adquirido el Reina Sofía eran suyas. Se trata de las obras  del grupo Centro de Cálculo, “Llevamos 10 años rescatando artistas y movimientos olvidados, tras este éxito estamos muy contentos, sobretodo, por dar a conocer a estos autores que actualmente están dormidos en el mercado del arte” comentó el mismo José de la Mano, “Ya que este movimiento fue el pionero en España, hemos perseguido su difusión. Existen muchos artistas importantes y a la vez desconocidos, además, opino que hay una saturación de contemporaneidad, es bueno volver a las décadas de los 70, 80…” añadió.

El diario El Confidencial la ha llamado “La esperada feria de recuperación” tras una época donde la crisis de no ha pasado desapercibida. La mejoría respecto a 2016 ha sido innegable, el optimismo tanto por parte de los participantes como de los coleccionistas se ha superado. “Arco 2017, más mercado que nunca” ha sido el título de la noticia de Libertad Digital, también ofrecen el dato de que el impacto económico en la ciudad ha sido de 100 millones de euros, el cuadro más caro ha sido un Juan Muñoz, en la galería Elvira González, titulado Three man laughing at one, por 1,5 millones, aunque de cerca le sigue el dalí de Leandro Navarro con un precio de 1,4 millones €. Menos estridencias, muchas ventas, precios altos, más visitantes y sobretodo un desbordante optimismo. ARCOmadrid refortalece el mercado en el mes del arte que acaba de terminar. ¿Lo superará 2018? Ana Robledano Soldevilla.